07 julio 2008

integración

Este artículo nos recuerda que si no miramos con buenos ojos, el futuro será más negro. La cuestión de la integración de los inmigrantes en la sociedad es asunto de todos: del que viene por integrarse y del que está por facilitar su integración. Así como cuando recibes visitas en tu casa la visita acepta tu hospitalidad -aunque no le apetezca el canapé- y tú se lo ofreces para que se sienta a gusto aunque tener el canapé te haya hecho cocinar un poco, las relaciones con la inmigración deben ser muy parecidas (valga el cutre símil que se me ocurre a estas horas de la noche). La formación de guetos deprimidos de inmigrantes y los males que conllevan está en juego.

Mirar con buenos ojos es el comienzo de la integración positiva.

Este es el link al artículo.

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