14 junio 2006

PASARLO BIEN

Cuatro a cero. ¡Vaya, una alegría!

Y es que no estamos acostumbrados a esto, y mejor que no lo hagamos o el golpe será más fuerte. Después de semejante movilización, con dos cadenas retransmitiendo el partido: la una con programación especial, la otra con programación exclusiva (¿será que no tenían otra cosa que poner?) ya les valía, porque de perder, el batacazo tampoco habría sido normal. En cualquier caso, parece que todo le ha venido al dedo a la primera: el rojo ha reinado y el cuatro, también (mañana, "alguien" dirá que estaba amañado).

Pero yendo a lo importante: lo pasaron, como se suele decir, como críos, y se ha notado. Y no solo ellos, todos. Gracia especial me hizo Doña Letizia (seamos formales), que desde luego no le pueden decir que no cumpla su papel de apoyo institucional: jugada peligrosa, jugada en la que dejaba el abanico, se echaba instintivamente hacia adelante y se disgustaba si ésta no llegaba a buen fin (para españa, claro está) mientras el consorte permanecía impasible a su lado (lástima que no haber encontrado la foto).

PASARLO BIEN, es lo importante. Desde luego que cuando vas perdiendo no lo pasas bien, pero si juegas mal, tampoco. Jugar bien, es pasarlo bien. Esto ha pasado, y he ahí el resultado. ¡Cuatro a cero!. Señores, a pasarlo bien.

*con tanta SGAE dominando el mundo, no se si esto del interés nacional me permite poner esa foto; en cualquier caso, yo de esto no hago oficio ni beneficio.

04 junio 2006

Japón

A petición de mi más activa comentarista, he hecho un álbum de fotos de Japón, donde tuve la suerte de estar recientemente. El link lleva al slideshow, un resumen de las incontables fotos que tengo, espero que les guste.

http://s72.photobucket.com/albums/i181/marodi/Japon/?action=view&slideshow=true

*el slideshow está al revés de como yo lo pensé, pero no se cómo cambiarlo, y rehacerlo es mucho rollo, espero que no canse.

03 junio 2006

Orgullo

Creo que necesitamos cosas de las que sentirnos orgullosos. Si no, la satisfacción de lo conseguido es, si la hay, efímera. Cuando obtienes una nota del trabajo realizado que es positiva y suficiente para seguir adelante, pero sabes que es escasa para tus posibilidades, que no está acorde con lo que eres capaz de lograr, no es motivo de orgullo y por tanto, tampoco de alegría. Como mucho, indiferencia.
Pero tampoco se puede pretender obtener el resultado del que te sentirías orgulloso si realmente no lo has trabajado y eres, a priori o posteriori, consciente de ello. En este caso, la decepción es peor, porque no solo es el resultado, un momento en el tiempo, de lo que no te sientes orgulloso, sino de todo el proceso, un tiempo mucho más dilatado. En definitiva, es la sensación de haber estado haciendo lo que no debía durante un largo tiempo. Errar en el método, en la forma, en el fondo. La situación sirve al menos para tomar conciencia, primer paso para cambiarlo, primer camino hacia el orgullo personal.

En cambio, cuando algo se ha trabajado duramente, se ha puesto ganas y tiempo, cuerpo y mente, se consiguen resultados acordes a ello, es el caso de gente que me rodea y por la que siento verdadero orgullo.

Felicidades a quienes lo han hecho y se lo han merecido. ¡Feliz verano!